Diversificar tu inversión es una de las estrategias más importantes que los buenos inversores utilizan para asegurarse retornos positivos a largo plazo y acordes a sus expectativas definidas en sus planes de inversión.
Al fin y al cabo una buena diversificación de tus inversiones actúa como un “aplanador”. Aplana tus rentabilidades. Es decir, evita grandes “picos”. Tanto positivos como negativos. En el caso de tener un patrimonio importante del que se vive o del que se aspire a vivir es muy importante diseñar una buena estrategia de diversificación para asegurarse que no hay “sorpresas significativas” en las rentabilidades obtenidas respecto a las diseñadas en el plan de inversión.
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Entendiendo los coeficientes alpha y beta
Antes de entender bien la diferencia entre diversificar o dispersarse es importante entender la alpha y la beta de un determinado producto de inversión. Por ejemplo un fondo de inversión.
Mientras que el coeficiente alpha nos habla de la rentabilidad adicional (o inferior) aportada de ese determinado producto de inversión por el valor aportado por el gestor. Es decir una alpha positiva nos indica que el gestor ha aportado valor y una rentabilidad extra mientras que una alpha negativa nos indica que el gestor ha restado rentabilidad respecto al mercado debido a sus decisiones.
Por otro lado, el coeficiente beta nos indica la correlación del producto en si con ese determinado mercado. Para entendernos, si compráramos un índice americano y nos olvidamos durante 10 años tendríamos una alpha que tendería a 0 (pues nos hay ni aportación de valor ni sustracción de valor) y una Beta que tendería a 1 pues la correlación con el mercado de referencia sería prácticamente del 100%.
Buscando un alpha=0 y una beta=1 a largo plazo en nuestras diferentes inversiones
Para invertir y no especular a largo plazo tenemos que entender que aspirar a tener alphas positivas en nuestras diferentes inversiones es extremadamente complejo e incluso en cierta forma irracional. Durante décadas la realidad nos ha demostrado que muy pocos inversores son capaces de estructuralmente crear alphas positivas. De hecho, lo normal es tener sesgos negativas por el factor irracional de las emociones que tanto daño nos hacen en nuestras inversiones.
Por ello, cuando hablamos de invertir a largo plazo una buena estrategia de inversión consiste en invertir en productos cuyos alphas tiendan a 0 y cuyos Betas tiendan a 1.
De este modo nos aseguramos tener rentabilidades parecidas a la de los mercados. Esto aplicaría tanto a mercados de renta variable, monetarios, start-ups o inmobiliarios. Es evidente que en algunos de estos mercados es relativamente fácil encontrar estos productos como renta variable y en otros es muy difícil como en el caso de las las start-ups donde las alphas o son muy positivas o muy negativas.
Buscando inversiones con diferentes grados de correlación o correlación negativa
La teoría de la diversificación afirma que debemos buscar activos no correlados entre ellos para poder minimizar los riesgos de pérdidas importantes. El problema es que no es tan evidente encontrar activos donde invertir no correlados.
Por ejemplo, uno puede pensar que la bolsa española es muy distinta que la americana. Y la realidad es que claramente el tipo de empresas que componen sus índices son para empezar tanto geográficamente como a nivel sectorial muy distintas. El problema es que la correlación de estos dos productos de inversión es de más del 70%. ¿El motivo? La bolsa americana pesa más del 30% en el mundo y en un mundo cada vez más globalizado lo que pasa en América afecta a todos los mercados y obviamente también en las grandes multinacionales españolas que componen el índice español.
Un ejemplo de correlación negativa lo encontramos entre la prima de riesgo Española y el Ibex 35.
Genial. Hemos encontrado dos conceptos totalmente descorrelados. ¿El problema? No es evidente encontrar productos invertibles totalmente correlados a la prima de riesgo española. O al menos no para el gran público ya que no soy nada amante de los productos derivados que son difíciles de entender.
Por ello, a pesar de que disponer de activos con correlación negativa sería necesario para tener una buena diversificación en la práctica es muy complejo ya que no existen productos sencillos que nos permitan lograr estos objetivos.
¿Entonces cómo diversificamos?
Más allá de las diversificaciones clásicas que comentaremos más adelante probablemente el concepto más potente que me gustaría transmitir es el de la diversificación que se crea en tu cabeza a través de productos con distintos grados de liquidez.
Sabemos que en general los humanos invierten mal porque toman decisiones basadas en emociones en momentos de pánico o en momentos de euforia. Por ello, hemos de crear un sistema lo suficientemente diversificado o con distintos grados de liquidez para que nos ayude a que cuando entremos en “modo irracional” no lo tengamos fácil de cara a deshacer posiciones (que previamente hemos adquirido después de una racional estrategia de inversión).
Un ejemplo para ayudarnos a entender como diversificar nuestras inversiones
Para visualizar un ejemplo sencillo y práctico pensemos en una persona de 62 años que tiene un patrimonio de 1 millón de euros y que dispone de los siguientes 4 activos:
María – 62 años – Inversión de 1M€ diversificada principalmente en 4 productos de inversión distinto:
- 3 viviendas valoradas en 400.000 euros que le generan una renta mensual bruta de 1.700 euros
- 200.000 euros en productos monetarios sin riesgos (cuentas corrientes, depósitos)
- 150.000 euros en su plan de pensiones indexado de bajas comisiones con el 50% del peso en renta variable.
- 250.000 euros en diferentes acciones (con reinversión automática de dividendos) y fondos de inversión
Juan – 62 años – Inversión de 1M€ diversificada principalmente en 2 productos de inversión distinto:
- 200.000 euros en productos monetarios sin riesgos (cuentas corrientes, depósitos)
- 800.000 euros en diferentes acciones (con reinversión automática de dividendos) y fondos de inversión
María es una buena profesional con un muy buen salario, no se considera una experta en inversiones pero de vez en cuando se informa del tema y su sentido común le ha llevado a aquello de “no poner todos los huevos en la misma cesta”. Su idea es jubilarse en 3 años porque quiere realizar el camino de Santiago durante el otoño o la primavera y porque considera que ya ha trabajado suficiente.
Juan es un profesional financiero exitoso. Se considera un gran inversor y experto del tema. Lee mucho y sabe que a largo plazo la inversión a renta variable es la mejor y además le aporta liquidez. No le gusta invertir en tocho porque le molesta la gestión asociada a ello. Su idea es jubilarse en 3 años porque acaba de ser abuelo y quiere disfrutar de su nieto. Ha leído mucho acerca de la regla del 4% (extraer anualmente el 4% de su patrimonio en fondos y/o acciones) y cree que podrá vivir bastante bien con su jubilación.
Si el año anterior a su jubilación el mercado de renta variable baja un 50% (cosa que en una vida humana puede ocurrir sin duda más de una vez y más de dos de forma muy probable) a María le fastidia mucho porque de golpe ha perdido más de un 20% de su patrimonio (acciones, fondos y plan de pensiones) pero es que al experto profesional financiero le fastidia más porque ha perdido más de un 40% de su patrimonio y peligra la jubilación que había soñado.
El problema de la afirmación anterior es que en realidad no es cierta. María ha perdido mucho más del 20%. En realidad sus activos inmobiliarios con bastante probabilidad pueden haber bajado de forma importante también. Pero a pesar de que tiene que ajustar ligeramente el precio de los alquileres debido a la crisis (el precio de los alquileres se mueve más lento que el precio de la vivienda) su percepción es que su riqueza no ha bajado tanto como en el caso de Juan.
Y las percepciones son muy importantes. Porque nos permiten vivir mejor (al fin y al cabo ese es el principal objetivo de una gestión eficiente de nuestro dinero) y nos permiten estar más tranquilos lo que no nos lleva a tomar decisiones menos irracionales.
Juan puede ponerse muy nervioso y materializar sus pérdidas vendiendo el 90% de su renta variable para pasarlo a productos monetarios o de renta variable y olvidarse de la apreciación de activos importantes durante los próximos 30 años que le quedan de vida (sí, Juan es muy sano y vivirá muchos años). Mientras que María ni se plantea vender sus inmuebles ya que ve las rentas de sus inmuebles como su seguro de jubilación por si el estado no le paga su pensión (ella, como es muy mal pensada, piensa que algún día eso podría pasar). Además le hace mucha ilusión mantener sus inmuebles para que sus hijos lo puedan heredar en un futuro.
Cuando pensamos en María y en Juan tenemos que pensar que en esto de la diversificación de inversiones la cabeza juega un papel muy relevante por ello cada uno de nosotros tenemos que encontrar motivaciones más allá del puro rendimiento económicopara poder mantener los activos a largo plazo ya que sabemos que es la única forma sostenible de garantizarnos no caer en las emociones que tanto daño nos hacen como inversores.
Lo importante es entender que lo perfecto desde un punto de vista académico no tiene porque ser lo que te funciona a ti como inversor.
Diversificación mental | Diversificación por tiempo | Diversificación por productos | Diversificación por objetivos |
Incentivos más allá de la rentabilidad (activos tangibles como viviendas) | Inversión de golpe | Monetarios | Universidad niños |
Iliquidez que dificulta la toma de decisiones impulsivas | Inversión automatizada mensual indefinida | Renta Fija | Jubilación |
Inversión periódica en un determinado periodo de tiempo para dividir una cantidad grande a invertir | Renta Variable | Vivienda | |
Inmobiliario | 2a residencia | ||
Empresas privadas | Regalos | ||
Start-ups |
Ejemplos de estrategias de diversificación de la inversión
Más allá de las diferentes estrategias al diversificar tus inversiones es importante tener un plan en el que apoyarte para que te ayude especialmente en los momentos de mercados difíciles.
Como las necesidades de diversificación dependen en gran medida de las situaciones personales de cada uno (edad, patrimonio, situación familiar, estilo deseado…) sería irresponsable por mi parte definir tu estrategia de diversificación. En todo caso para ser pragmático y concreto he decidido mostraros la estrategia de inversión que compartimos como unidad familiar.
Eliminamos de la ecuación nuestra vivienda habitual que como sabéis no genera caja sino más bien lo contrario y por ello no es un activo generador de caja. Tampoco me gusta la definición de decir que es un pasivo (a lo “rich dad, poor dad”) porque financieramente no lo es. Simplemente es un activo que se aprecia en el tiempo pero que aporta cash flow negativo.
Así que sin contar con nuestra vivienda habitual somos una familia fregando los 40 años (aún no llegamos ?pero nos queda poco) con hijos pequeños con un patrimonio de alrededor de 1 Millón de Euros (restando activos – pasivos).
Nuestro asset allocation o diversificación de nuestras inversiones queda actualmente:
Nuestra estrategia de diversificación (asset allocation) – Familia numeroso con padres menores de 40 años con patrimonio de 1M€ (excluyendo vivienda habitual)
Valor Activo | Deuda asociada al activo | Total Activo (valor – deuda) | % Activo | Rentabilidad anual esperada a largo plazo (sobre la caja desembolsada) | Liquidez | |
Caja – Cuentas bancarias sin riesgo | 232.000€ | 0€ | 232.000€ | 23% | 0% – 2% | Total (sin riesgo al jugar con la garantía de los 100.000 € por banco y titular) |
Renta Variable | 306.000€ | 0€ | 306.000€ | 30% | 6% – 10% | Alta |
Inmuebles alquilados | 880.000€ | 525.000€ | 355.000€ | 35% | > 10% (al haber apalancamiento – ver post) | Baja |
Inversión en empresas de nueva creación | 135.000€ | 0€ | 135.000€ | 13% | -10% – +20% (mucha dispersión posible a pesar de la alta diversificación dentro de esta inversión) | Inexistente |
Total € | 1.553.000€ | 525.000€ | 1.028.000 € | 100% | 5% – 10% | Suficiente para nuestras necesidades |
Cómo podéis ver en nuestro caso el tipo de inversión con más peso es el inmobiliario donde tenemos 4 viviendas apalancadas que alquilamos y una serie de parkings que compramos sin deuda durante la crisis a muy buen precio. El motivo por el que el “real estate” ocupa tanto peso es principalmente nuestra situación crediticia. Al tener la vivienda habitual pagada y al trabajar ambos miembros de la familia con buenos salarios y además ser menores de 40 años los bancos nos ofrecen unas condiciones muy buenas y hemos querido aprovecharlas para poder invertir en viviendas como ya explicamos en este post. Esta diversificación inmobiliaria la hubiéramos podido efectuar con REITs con una rentabilidad quizás superior, menos riesgo y más diversificación geográfica. El motivo por el que no lo hemos hecho es que pensamos que al tener 3 hijos quizás en el futuro alguno de ellos podrá usar algunas de nuestras viviendas (o no). Así que de nuevo véis que actuamos con cierta irracionalidad por un motivo que nos regala tranquilidad.
Nuestra idea es en el futuro ir aumentando las posiciones porcentuales más liquidas como en renta variable que a largo plazo (sin apalancar) deberían dar si se usan los productos correctos (fondos indexados de bajas comisiones y muy diversificados) una rentabilidad muy interesante.
Respecto la parte de renta variable ya podéis adivinar que los 300.000 euros los tenemos en productos como planes de pensiones y fondos indexados. En ambos casos, buscando no batir el mercado sino siendo largoplacistas. Cada mes invertimos en nuestros planes de pensiones y en nuestros fondos de forma automática.
Pagamos primero nuestro futuro y después nos centramos en gestionar el presente a nivel de caja.
Respecto a las start-ups nos hemos fijado un máximo a invertir de un 15% de nuestro patrimonio. La forma de invertir ahí merece un buen post que más adelante veremos.
Diversifica con cabeza y estrategia y gana en rentabilidad y sobretodo en tranquilidad mental. Y sabemos que esto último no tiene precio.
Foto: Nukamari (no pongas todos los huevos en la misma canasta)
Hola Alberto,
Me encanta tu web, la calidad de tus posts es muy alta, además me siento muy identificado con tu situación personal y económica. Enhorabuena por tu excelente trabajo!! Seguiré enganchado a tus publicaciones.
Gracias y un saludo, Juan Carlos
Muchísimas gracias por tus comentarios Juan Carlos!
Se agradecen mucho!
Nos seguimos,
Hola Alberto,
Felicitarte por el contenido de calidad que generas. Qué bibliografía o blogs (a parte del tuyo jeje) me recomendarías para aprender sobre productos en fondos de inversión (renta fija, variable, indexados, acciones, bonos, etc..) ?Buscaría algo para empezar desde 0 e ir progresando. Mi formación es en ingeniería industrial, trabajando en gestión de proyectos de obra pública y privada (todo a nivel técnico). De inversión y rentabilidades poco he hecho o estudiado. En Internet, leo bastantes cosas, pero noto que me falta una base sólida de conocimiento. En tu caso, cómo aprendiste ?
Gracias y saludos !
Gracias Carlos,
En mi caso me apasiona leer.
Mi libro preferido es sin duda.
El millonario de la puerta del lado.
Me parece muy ilustrativo y muy adecuado para crear tu patrimonio. La serie de Rich Dad también es bastante didáctica.
Saludos!